En la Grecia antigua, el futuro de un bebé estaba totalmente en manos de su padre, quien decidía si lo dejaba vivir o no. Si el bebé era una niña, o no era fuerte, o si la familia no podía mantenerlo, el padre podía decidir abandonarlo. Entonces la criatura era dejada a la intemperie para que muriera.
Algunos bebés abandonados eran salvados por otras familias y se criaban como esclavos. Sin embargo, una vez que un bebé era aceptado formalmente por su familia y recibía un nombre a los 10 días posteriores a su nacimiento, él o ella era tratado muy bien.

Se han hallado muchos juguetes y los escritos hablan de juegos como la gallina ciega.
Los juguetes eran de tela o madera pero de estos no se han encontrado rastros, no así con los juguetes fabricados en arcilla, tal vez hechos por los alfareros con material sobrante. Muchas de estas figuritas de arcilla se han encontrado en tumbas de niños quizá para que los acompañen hasta el más allá.

En Atenas y muchas ciudades griegas, los niños iban a la escuela a partir de los siete años. Las niñas no lo hacían.
Al rededor de los 12 o 13 años, los niños se consideraban jóvenes adultos y podían ofrendar sus juguetes al dios Apolo y a la diosa Artemisa, como símbolo de que su infancia había terminado.
Educación
Cuando los niños iban a la escuela, a los siete años aprendían a leer, a escribir y aritmética, con maestros llamados grammatistes.
Aprendían música, incluyendo la ejecución de un instrumento musical, con profesores conocidos como kitharistes. También tenían que aprender poesía de memoria y el arte de debatir.

En la escuela, los niños de familias ricas eran cuidados por un esclavo llamado peidogogo.
En el salón de clases se usaban tablillas de madera cubiertas con cera. Las letras se hacían en la cera con un punzón, por lo general de hueso o de metal. La punta roma servía para borrar los errores.

Los niños mayores podían ser educados por maestros llamados sofistas. Estos viajaban de pueblo en pueblo y a veces instruían a sus alumnos en los gymnasia, o campos de entrenamiento.
A pesar de que las niñas no iban a la escuela, algunas de familias ricas tenían tutores privados y también aprendían a leer y escribir. Sus madres les enseñaban a hilar y tejer, y cómo manejar una casa.
Entrenamiento para la guerra
Tradicionalmente, los niños debían ser aptos y fuertes de modo que pudieran volverse buenos soldados. Por lo tanto había maestros especiales de ejercicios físicos llamados paidotribai (paidotribes en singular).

Los paidotribai enseñaban atletismo y lucha en la palaistra (palestra). Ésta era un edificio bajo y alargado con vestidores y un patio con columnas cubierto de arena. La mayoría de las ciudades griegas tenían una palaistra.
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FUENTE: Nueva enciclopedia visual Clarín - Grecia Antigua
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